Descripción

Este notable centro de conservación es el hogar de la vicuña, la alpaca, la llama, el guanaco y otros camélidos de Perú especialmente adaptados al frío extremo de los Andes. Mientras atraviesa este paisaje virgen, prepárese para dejarse cautivar por la encantadora presencia de vizcachas, escurridizos roedores salvajes, majestuosas águilas y gráciles patos, todos ellos parte del próspero ecosistema de la reserva. No pierda de vista el impresionante vuelo de los cóndores, un espectáculo sobrecogedor que le conectará con los cielos andinos. Aquí, en el regazo del esplendor de la naturaleza, se encontrará con un tapiz de flora y fauna únicas, haciendo de cada momento un viaje inolvidable al corazón de la naturaleza salvaje de Nazca.

ITINERARIO
El tour comienza temprano, el guía le recogerá en su hotel y se dirigirá hacia la reserva nacional.
A lo largo del camino disfrutará de un maravilloso escenario natural que combina diferentes zonas ecológicas que van desde las lomas costeras con poca vegetación, hasta las alturas andinas cubiertas de vegetación propia del lugar.
Nuestro guía brindará información de cómo se recuperó una práctica ancestral denominada Chaccu donde se acorralaba y esquilaba vicuñas sin sacrificio en tiempos ancestrales donde el hombre con gran respeto por la naturaleza realizaba Apus y ofrendas a sus dioses para buscar su protección, destacando la vicuña animal nativo y productor de la fibra más fina del mundo. Fin del servicio y retorno a nuestros hoteles.
Llegando a una visita museo de sitio, donde observaremos la fauna propia para ubicarla allí, luego caminaremos para conocer y aprender más sobre la flora y fauna única del parque. El parque nacional de la vicuña se encuentra a 90 km. de Nazca, siguiendo una carretera en zigzag/empinada que nos conduce a los Andes peruanos. En esta zona viven las cuatro especies de camellos sudamericanos (vicuña, alpaca, llama y guanaco), que pueden verse pastando libremente por el altiplano.
La vegetación característica de la reserva es el pastizal (ichu). En los valles pedregosos es posible encontrar bosques relictos de quinua y quishuar y rodales del cactus candelabro. La especie más representativa y abundante de esta reserva es la vicuña, cuya protección y conservación motivó la creación de esta unidad. Otra especie importante es el guanaco, que al igual que la vicuña, es uno de los camélidos sudamericanos que se encuentran en estado silvestre.
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